Por: Karla Sánchez, Arquitecta y miembro del partido Molirena (Egresada de la Escuela de Formación Política ‘Brújula Mujer’)
Muchos jóvenes en la actualidad no les interesan o no se atreven a participar en la política por el hecho de que están decepcionado de la clase política actual.
Soy una joven que estoy iniciando en la política y debo decir, que no ha sido fácil, en muchas ocasiones me ha tocado escuchar a figuras de alta jerarquía de los partidos y del gobierno expresarse de forma sarcástica o burlesca sobre temas que afectan la vida diaria de los panameños, como por ejemplo: la falta de agua en algunos sectores, el desabastecimiento de los medicamentos, el desempleo, la falta de transporte público, los precios altos de la canasta básica, la lucha por el aumento del salario mínimo, entre otros temas.
Pienso que si ellos que son nuestros gobernantes y líderes se expresan de esta manera, qué podemos esperar del futuro si Panamá sigue en manos de esta minoría. Necesitamos con urgencia nuevos liderazgos juveniles que estén dispuesto a cambiar el país.
El estudio llamado: “Juventud, Población y Desarrollo: Problemas, oportunidades y desafíos”,de las Naciones Unidas manifiesta que: “los jóvenes Latinoamericanos tienen por delante un enorme desafío”, por lo que debemos ser conductores de un proceso de Desarrollo Social y Económico, para que de esta manera, podemos dar soluciones a las problemáticas que nos afecta a todos. Y es que una sociedad que aísla a sus jóvenes, corta sus amarras y está condenada a desangrarse.
Por otro lado, no debemos perder la esperanza y el optimismo de que la buena política sí existe, debemos unirnos y luchar por todas las problemáticas que nos afectan como sociedad, porque todos estamos de acuerdo de que la corrupción es un enemigo mortal para la Democracia.