En la huerta de Aida Rodríguez Reyes se produce de todo: achiote, pimienta, maíz, plátano, yuca, repollo, lechuga, ají y guandú. También tiene una pequeña granja de gallinas que le proporcionan carne y huevos, y una tina donde cría tilapias.
Esta mujer, que reside en el distrito de Trinidad, en Capira, es beneficiaria del programa Red de Oportunidades del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), que atiende a 41,966 mujeres, la mayoría de ellas residentes en áreas rurales.
El día de Aida comienza a las cuatro de la madrugada. Con una taza de café, despide a su hijo, quien cursa el noveno grado. Luego, se calza unas botas de caucho y se adentra en el monte a trabajar.
Aida siempre va equipada con machete, azadón y rastrillo. Disfruta hurgar la tierra con la coa. Se ha especializado en todo lo relacionado con la agricultura de subsistencia, gracias a los cursos que recibe del Programa de Redes Territoriales, administrado por la Dirección de Inversión para el Desarrollo del Capital Social del MIDES.
A través de estas capacitaciones, esta beneficiaria del programa Red de Oportunidades aprendió a migrar de una agricultura de subsistencia a una basada en tecnología, que permite obtener altos rendimientos en espacios reducidos. Lo más importante es que lo logró aplicando procesos amigables con el medio ambiente.
Está muy consciente de los efectos perjudiciales que tiene el uso de sustancias químicas en los suelos y cultivos.
Con el MIDES, adquirió semillas certificadas que garantizan buenas cosechas. También aprendió a producir abono orgánico a partir de gallinaza, melaza, hongos, microorganismos como la Trichoderma, estiércol, jugo de caña y maíz germinado, entre otros.
Recientemente, un grupo de voluntarios del MIDES la ayudó a preparar una parcela donde sembrará tomates, lechuga y repollo.
Lo más importante para Aida es que aprendió que la yuca se siembra con un metro de distancia entre plantas; que entre cada planta de ñame debe haber una separación de 50 centímetros, y que las matas de plátano requieren tres metros de distancia entre sí. Estas técnicas de siembra son esenciales para lograr una buena cosecha.