Como alternativa ante el alto costo de los medicamentos en la República de Panamá, el Colegio Nacional de Farmacéuticos(Conalfarm) propone desarrollar el uso de fitofármacos para el tratamiento de diversas enfermedades.

En nota enviada por Jaime Olive, presidente de Conalfarm, al embajador de Panamá en la República de China, Leonardo Kam, expresa su interés de establecer vínculos con entidades chinas con el fin de desarrollar intercambio de conocimientos sobre la medicina tradicional china con los fitofármacos panameños, así como considerar la viabilidad de establecer protocolos de cooperación en esta materia.

El diplomático les respondió que han dirigido una comunicación formal a la Asociación China de Medicina Tradicional, transmitiendo el interés expresado por Conalfarm, mediante solicitud de la embajada.

Olive señala que el Colegio Nacional de Farmacéuticos de Panamá mantiene interés de diseñar un proyecto de plantas medicinales, que han demostrado la eficacia como medicina alternativa, sobre todo con el alto costo de los medicamentos químicamente modificados.

“Sabemos de la cultura milenaria China en medicina desarrollada en beneficio de la salud. En nuestro país existen excelentes investigadores con preparación panameña y extranjera en el área de fitofármacos, pero no hemos encontrado un mecanismo que nos permita hacer transferencia de ese valioso conocimiento y obtener el apoyo gubernamental para aprovechar este posible potencial de medicina alternativa, como ya lo reflejan dentro de la región otros países con menos recursos que los nuestros”, indicó el directivo de Conalfarm.

Informó que el colegio ha expuesto esta alternativa ante las autoridades de salud, alegando que los medicamentos fitofármacos han demostrado que pueden mejorar mucho el estado de salud.

“Panamá, ha sido pionero en este tipo de investigación. En nuestro período, al frente del colegio, deseamos impulsar esta alternativa que puede ser el desarrollo económico de algunos sectores que incursionen en este campo”, expresó.

Agregó Olive que para lograrlo tienen que conversar con el cuerpo médico para que puedan prescribir medicamentos de plantas, sin ningún cambio químico y con las autoridades de salud para establecer los protocolos y guías en esta alternativa de salud, tal cual lo hacían nuestros ancestros.

Sobre este tema ya existe una legislación que regula las plantas medicinales que utilizan los grupos originarios de la República de Panamá.