Grupos técnicos del sector público agropecuario (MIDA-ISA-BDA-ARAP-IDIAP) continúan con las evaluaciones de los cultivos afectados en la provincia de Chiriquí, por los efectos del huracán ETA.
En el distrito de Barú se ha evaluado el 60 por ciento de los cultivos de plátano, donde ya se han contabilizado 859 hectáreas afectadas. Esto nos pone en una situación bastante preocupante porque estas plantaciones estaban, en su gran mayoría, en el período de cosecha, mencionó Blanca Gómez, secretaria técnica del Gabinete Agropecuario.
“Tenemos ese nivel de afectación y estamos procurando determinar cuál será la situación de aquí a dos o tres semanas cuando las aguas terminen de bajar”, explicó.
En la parte occidental de la provincia de Chiriquí también se vieron afectados los cultivos de rubros como palma aceitera, arroz y otros de pequeños productores como papaya, yuca, zapallo, guandú y frijol. Además en la zona baruense también se han estimado daños a drenajes, canales primarios y secundarios por el orden de B/.673,602.15.
En el distrito de Tierras Altas, las afectaciones más importantes se han dado en los sistemas de riego; sin embargo, aún hay áreas donde no se ha podido llegar por las malas condiciones del tiempo que han provocado deslizamientos e inundaciones.
“Tenemos ahora una alerta roja por el huracán IOTA; sin embargo, estamos tratando de llegar hasta donde sea posible para ir levantando esos datos, sin poner en riesgo a nuestros equipos”, dijo.
En Renacimiento, donde el MIDA tiene un registro de 727 productores de café, no se ha podido avanzar al ritmo esperado, ya que hay muchos caminos de producción que han colapsado. Hasta el momento sólo se ha podido llegar a 28 fincas cafetaleras, de las 728 que tenemos registradas.
“En esta región del país, se han dado deslaves, desprendimiento de suelos que sin duda alguna están poniendo en riesgo estas cosechas” y continúa lloviendo en muchos sectores, agregó.
Los niveles de inundaciones registrados no tienen antecedentes por lo menos en los últimos 50 años, según han manifestado los moradores, en particular del área de Barú.
Los productores por su parte han solicitado apoyo en la dotación de abonos, nematicidas y fungicidas. Esta petición está siendo evaluada por los equipos técnicos y las autoridades agropecuarias.
“El apoyo debe darse de manera rápida, contundente y oportuna, pues una ayuda tardía, no es ayuda”, dijo Gómez.
El sector ganadero también se ha visto afectado en la región chiricana, dejando pérdidas que alcanzan los B/.725,778.55. Los informes que se han levantado detallan que existen unos 108 productores afectados entre ganaderos, pérdidas de semovientes, pastos mejorados, forrajes y pérdidas de tierras. Mientras que el sector porcinocultor, avícola y apícola también resultó con afectaciones.
Cabe destacar que el grupo de técnicos que realiza estas evaluaciones es interinstitucional, ya que participan funcionarios del MIDA, del Instituto de Seguro Agropecuario, el Instituto de Investigación Agropecuaria de Panamá, la Autoridad de Recursos Acuáticos de Panamá y Banco de Desarrollo Agropecuario.
Es importante señalar que éste es el primer corte que se realiza a los ocho días de haber iniciado la colecta de los datos, con el fin de determinar el estado de situación de los cultivos. Estas cifras pueden ir variando en la medida en los equipos técnicos vayan avanzando en las áreas a las cuales todavía no se ha podido ingresar a causa de las lluvias.